«La esencia democrática es la creciente participación de la sociedad en la toma de las decisiones” Segunda jornada de ELAP Ecuador 2015

Quito, 29 de septiembre de 2015.- Vicepresidente Jorge Glas Espinel, participó de la II encuentro latinoamericano progresista ELAP 2015. Foto: Wladimir Játiva/Vicepresidencia.
1.434
Por Nodal Cultura
A primera hora de la mañana, la segunda jornada de ELAP Ecuador 2015 presentó ayer uno de sus momentos más esperados por todos los asistentes al encuentro: la conferencia magistral de Álvaro García Linera, vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia.

Ante las 2700 personas que llegaron temprano, y no se movieron de sus lugares durante la larga espera que supuso la demora de su llegada, el vicepresidente de Bolivia desarrolló su ponencia a propósito de algunas disyuntivas de la militancia política y la disputa por los sentidos, que terminan imponiéndose sobre la sociedad como forma de conocimiento, de sentido común, de prácticas cotidianas, que son esenciales para en el acceso y ejercicio del poder. Desarrolló un relato en 9 preguntas o alternativas, que fueron disparadores para pensar la acción política y de gestión gubernamental.

Navegando entre las nociones tradicionales de toma y ejercicio de poder de Lenin y la idea de hegemonía cultural de Gramsci, Linera se preguntaba (y concluía que ninguna decisión a favor de una opción que niegue a la otra es correcta) si era necesario construir el poder o tomarlo, si en la disputa por la hegemonía es necesario y suficiente la transformación del horizonte cultural previamente al acceso al poder o si por el contrario es posible construir hegemonía luego de tomarlo. Así circularon temas como la construcción del sentido común, la eficacia en la gestión económica del gobierno, el crecimiento económico o la protección de la madre tierra. Las oposiciones, cada una de las cuales el vicepresidente resolvía dialécticamente y no desde la preeminencia de una sobre otra, sirvieron para explicar la relación entre cultura, mundo simbólico, ejercicio del poder, gestión y convocatoria a sectores populares desde sus espacios vitales y con sus identidades.

El eje de su exposición giró conceptualmente a propósito de una relación fecunda y beneficiosa entre revolución y democracia, en los nuevos tiempos de América Latina. “Tiene que haber una resignificación de la democracia” afirmó, “Los procesos revolucionarios demuestran que la democracia no es una etapa temporal, un puente hacia una etapa superadora de la sociedad. No es una democracia procedimental, esa es una visión minimalista del Estado. La esencia democrática es la creciente participación de la sociedad en la toma de las decisiones”

Los paneles en la segunda jornada

En una mesa que pasó revista a los 8 años de la Revolución ciudadana, Guillaume Long, Ministro de Cultura y Patrimonio, Paola Pabón, Secretaria Nacional de Gestión de la Política y Carlos Marx Carrasco, Ministro de Trabajo, tejieron análisis que mucho tuvieron de coincidencias con lo dicho por el vicepresidente de Bolivia.  Redistribución de la riqueza, humanismo y modos de gestión de las políticas públicas que permitan a pueblo participar activamente en las decisiones al mismo tiempo que se demuestra eficaz.

Ya por la tarde Ricardo Forster, filósofo argentino y Secretario de Coordinación Estratégica para el Pensamiento Nacional; Dou Enyong, Ministro Asistente y miembro del Partido Comunista Chino; Arun Kumar, miembro del Comité Central del PC (marxista) de la India y Emir Sader, politólogo brasileño, conversaron a propósito de América Latina y los países emergentes en el nuevo escenario del mundo multipolar.

Tanto Enyong –desde el oficialismo- como Kumar, afirmaron la importancia que tiene Latino América para sus países, ya que el nuevo escenario global de relaciones internacionales la relación Sur – Sur se presenta como un eje novedoso, con un horizonte de potenciales beneficios mutuos en términos de desarrollo autónomo y sustentable.

Emir Sader hizo un análisis del proceso capitalista en su fase financiera y dejó ver que a su criterio el momento histórico global sigue siendo unipolar. “El capitalismo difícilmente pueda salir de su era neoliberal. El capitalismo financiero, que es la base de este momento de su desarrollo, vive del endeudamiento y esto genera una fase siempre recesiva. No aparece en el horizonte un cambio de esta fase a una que repita las condiciones de la etapa expansiva”, concluyó.

Sobre esta etapa del capitalismo, Forster analizó la etapa neoliberal, destacando su condición hegemónica más allá del momento que atraviesan algunos países de nuestra región. Coincidiendo con Sader en la afirmación de un momento unipolar, analizó esta hegemonia como un constructo cultural. Si no fuera así, no sería posible explicar la situación global de violencia simbólica y sobre los cuerpos que sufren millones de personas en las fronteras calientes europeas o la humillación a la que es sometido el pueblo griego por Alemania, la troika y un coro de países que son victimarios y podrían ser en cualquier momento víctimas de ese capitalismo financiero. Sin una incorporación del paradigma cultural neoliberal en las subjetividades populares, esto no sería posible. Y esta situación es visible también en América Latina, por lo cual es necesario tomar conciencia del trabajo en el orden de la disputa por el sentido común y los modos de comunicación. “Debemos disputar el lenguaje del sentido común, la lógica que hace de la cultura puro espectáculo, el de los intercambios comerciales, pues ellos responden totalmente a las lógicas neoliberales”, finalizó el filósofo argentino.

Ya entrada la noche se produjo el conversatorio con los cinco héroes cubanos, que convocó gran cantidad de público en la sede del CIESPAL – Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina.

 

También podría gustarte