[LibrosLibres]: Que el mundo tiemble. Cuerpo y performance en la obra de Effy Beth
Por Antonela Riso
Matías Máximo, periodista del suplemento SOY de Página 12, la acompañó a lo largo de sus conquistas por ser una mujer ante la burocracia estatal. Y luego de su partida, decidió reinvindicar sus escritos, imágenes y performances compilados en un e-book de descarga gratuita: Que el mundo tiemble. Cuerpo y performance en la obra de Effy Beth.
“Comencé un tratamiento hormonal el mismo día que inicié mis estudios en el Instituto Universitario Nacional de Artes.
He puesto preservativos en esculturas públicas.
He enterrado mi identidad cuál semilla a la espera de un crecimiento.
He organizado una alfombra humana.
He vestido un pasillo sobre mi cuerpo.
Ingresé a un baño de mujeres en cuero cual hombre.
Expuse mi disfraz con el cual me travestía de varón para el trabajo.
Me declaré potencial amenaza a tus prejuicios (…)”.
(Extracto del primer pàrrafo de “Algo habré hecho” de Effy Beth)
APU:¿Cómo conociste a Effy?
Matías Máximo: nos conocimos previo a la sanción de la ley de Identidad de género. Soy periodista y por entonces Effy estaba peleando con un juicio al Estado para conseguir un DNI que tuviera su nombre. Por otro lado su pasaporte sí tenía el nombre que ella había elegido para llamarse, pero no le cambiaban el género, lo que le generaba varios problemas administrativos. Entonces comenzamos a hablar para una nota y nos fuimos conociendo.
Después la seguimos, porque una vez que le dieron su DNI tuvo dificultades para el acceso pleno a la salud, ya que la obra social no se lo reconocía. A través de las notas iniciamos una relación muy afectuosa.
APU: ¿Cómo surgió la idea de hacer el libro?
MM: A partir de las notas que fuimos haciendo empezó a crecer un archivo de Effy en mi PC. Cuando recibimos la noticia que Effy había terminado con su vida surgió la idea de compilar y preservar sus blogs y escritos. Durante este año nos reunimos durante meses con su madre, Dori, y con María Julia Prut, quien participó en el armado de una muestra que se hizo en el museo La Cárcova. Effy había dejado todo muy prolijo en su pc, lo que ayudó mucho en la tarea. A partir de ver qué teníamos y qué se podía mejorar, surgió una convocatoria entre muchas personas que habían sido parte de sus obras. Por ejemplo, Laura Gam aportó fotos valiosísimas, muchas que no estaban circulando por ningún medio. Los textos que se incluyeron hablan de una Effy cercana, no sólo de la obra, sino de cuestiones que tienen que ver con su forma de ser en el día a día. La editorial de la Universidad Nacional de La Plata aceptó el proyecto y también la condición de que fuera un material de descarga gratuita, para que desde cualquier parte del mundo se pudiera acceder. Son casi 400 páginas, por lo que el costo en papel ilustración sería muy alto. De todas formas, sería genial si en unos meses se concreta la posibilidad de hacer una tirada impresa.
APU: ¿Viste alguna vez sus performances? ¿Qué destacarías de sus obras?
MM: Presencié varias de sus performances y verla siempre te dejaba preguntas, te interpelaba. Es así que muchas veces volver sobre la obra de Effy, desde lo superficial, puede parecer algo muy duro de soportar. Pero en el fondo esos mensajes incómodos que daba a partir de su obra tenían un sentido de sanación. Al ver las obras en conjunto uno puede pensar que sus manifestaciones performáticas son un lenguaje íntimo, el lenguaje con el que mejor comunicaba lo que le pasaba, lo que quería transmitir y aquello que deseaba cambiar en la sociedad.
APU: Habiendo recopilado tanto material de Effy, para vos: ¿Cuál sería el mensaje de su legado?
MM: Tiene una fuerte conexión con llevar adelante los deseos y afirmarse, más allá que todo parezca establecido de una forma determinada e inamovible. Su obra puede ser vista como esas gotas que se meten dentro de las grietas de una piedra y al congelarse las rompen. Es decir, algo que a simple vista parece una materia frágil, pero que tiene la fuerza de derribar estructuras. También lo que se percibe es un gran afecto de parte de quienes la conocieron, en especial las personas trans que participaron de la compilación se muestran muy agradecidas por darle un sentido transformador a situaciones y sentimientos complejos.