El funeral que llega 130 años después

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Los restos de Margarita Foyel, hija del cacique mapuche Foyel y capturada en la Conquista del Desierto, serán devueltos hoy a la comunidad de Las Huaytekas, donde se realizará una ceremonia que culminará mañana con su entierro. Margarita fue capturada junto al cacique Inacayal –su tío– y la mujer de éste, y llevada al Museo de Ciencias Naturales de La Plata, donde vivieron y murieron en calidad de “prisioneros de la ciencia”. Sus restos estuvieron en las vitrinas de la institución y, gracias a las demandas de las comunidades originarias y otros colectivos sociales, fueron retirados primero, y restituidos después, el 10 de diciembre de 2014. En esa fecha, los restos de los tres miembros del pueblo mapuche-tehuelche fueron llevados a un mausoleo de Tecka, en Chubut, y luego enterrados en una ceremonia. Hoy, los restos de Margarita serán retirados del lugar para ser devueltos a su comunidad de pertenencia, en una ceremonia que se extenderá hasta mañana.

“Para nosotros esto representa una restitución de la dignidad a nuestros ancestros. Poder darle un entierro a la manera de la comunidad mapuche es lo más importante, ya que puede volver al lugar de donde nunca debió haberse ido”, sostuvo a Página/12 Elisa Ose, maestra intercultural de la comunidad Las Huaytekas. Este ritual comienza hoy a las 10 de la mañana con el retiro de los restos de Margarita del mausoleo donde estuvieron desde diciembre del año pasado en la localidad chubutense de Tecka. En caravana, transitarán los 300 kilómetros que los separan de ese lugar hasta el paraje rionegrino El Foyel (a 30 kilómetros de El Bolsón sobre la Ruta 40), adonde llegarán alrededor de las 2 de la tarde y darán comienzo a la ceremonia. La llegada de los restos de Margarita será escoltada con caballos hasta el rewe (una suerte de altar de forma circular), donde permanecerán durante toda la noche.

Junto al fuego, la comunidad se mantendrá en vigilia para, a las 6 de la mañana, dar comienzo a un guillipun, ceremonia mapuche “para dar aviso a las fuerzas de la entrega de Margarita”, precisó Ose. Después se procederá al entierro de los restos en una zona montañosa de la comunidad. “Se trata de un evento muy importante desde lo espiritual, porque ella se fue y nadie sabía qué le había pasado. Ahora regresa a su tuwün (territorio de origen) y para nuestro pueblo esto marca un nuevo ciclo de lucha.”

Margarita falleció en 1887, a los 33 años, mientras permanecía cautiva en el Museo de La Plata, tras ser capturada tres años antes por el Ejército a modo de castigo ejemplar contra los pueblos originarios que se rebelaban ante la llamada Conquista del Desierto. El cuerpo de Margarita, como los de otros miembros de comunidades aborígenes, estuvo exhibido en el museo durante décadas y luego, a raíz de los reclamos, fue retirado de las vitrinas el 22 de agosto de 2006. Años más tarde, el 10 de diciembre de 2014, los restos de la mujer fueron restituidos a su pueblo junto a los del cacique Inacayal y los de su mujer.

El coordinador del colectivo Guías (Grupo Universitario de Investigación en Antropología Social), Fernando Pepe, explicó que tanto el cacique Inacayal como su mujer fueron enterrados a fines del año pasado, después de su restitución. Además, el antropólogo destacó que “hubo muchas trabas burocráticas que demoraron estas restituciones e incluso la falta de un inventario, lo que complicó la identificación de los restos de las personas que vivían en el museo”.

Para el referente de Guías son múltiples los factores que generaron las condiciones para estas restituciones. En primer lugar, “con la llegada de la democracia hubo espacios para reclamos que por supuesto durante la dictadura no se pudieron dar, y las comunidades empezaron a organizarse”. También, el antropólogo resaltó la reglamentación, en 2010, de la ley 25.517 que establece que los restos mortales “deberán ser puestos a disposición de los pueblos indígenas y/o comunidades de pertenencia que los reclamen”. Esta reglamentación nombró como autoridad de aplicación al Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), que coordinó las distintas restituciones –en las que también trabajó Guías–, cuatro de ellas a nivel nacional y una de ellas que permitió devolver a Paraguay los restos de una niña de la comunidad aché que se encontraban en un museo en Alemania.

En tanto, Silvia Ametrano, directora del Museo de Ciencias Naturales de La Plata, relató que por los escritos antropológicos de esa época, existen descripciones muy interesantes sobre Margarita, que sostienen que se trataba de una mujer “de una personalidad muy alegre, con buenos modales y también muy bella, como se puede ver en el registro fotográfico de la época”. La directora consideró que “es evidente que están ocurriendo procesos de búsqueda de reconocimiento y reparación a los pueblos originarios en los que la ciencia es interpelada y cuestionada tanto en las prácticas que tuvo en el pasado como a las que tiene en la actualidad”.

Publicado en Página 12
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