Xul Solar Panactivista: la obra del hombre que inventó lo inexistente está en Buenos Aires
Xul Solar, el enigma que no cesa
por Ivana Romero
A más de medio siglo de su muerte, sus obras y también sus ideas continúan atrayendo a muchos. Fue un extraño y poderoso pintor, pero también brilló como astrólogo y hasta creó un idioma. Una imponente exposición y un reciente libro reactualizan la vigencia de un creador singular.
«Alejandro Xul Solar, pintor, escribidor y pocas cosas más. Duodecimal y catrólico (ca. cabalista, tro.astrólogo, li.liberal, co.cooperador)», se lee en la entrada de la muestra. Los visitantes —que esta tarde de sábado suman cientos— se detienen ante esas palabras con un poco de desconcierto y otro poco de risa. «¿Catrólico?», le pregunta una señora a otra que dice que sí, que algo será, que seguro la chica de la visita guiada les cuenta. Unos metros más adelante, una guía especializada está a punto de empezar un recorrido por Xul Solar. Panactivista, la muestra que homenajea a este artista a 130 años de su nacimiento y que reúne más de 180 acuarelas, témperas, pinturas, dibujos, objetos, manuscritos y documentos personales.
En el Museo Nacional de Bellas Artes, la guía le pide al público que observe un objeto pequeño en una vitrina, una hoja de un blanco desvaído, que mide apenas 15 centímetros. En ella hay trazadas líneas con lápices de colores. Y también, números y signos. Se trata de la carta astral de Xul, que indica que este señor nació bajo el nombre de Oscar Agustín Alejandro Schulz Solari el 14 de diciembre de 1887 a las 11.20 en San Fernando, Buenos Aires.
No casualmente este objeto de apariencia ínfima es lo primero que el visitante ve apenas comienza su recorrido. Ahí, en esos signos que unen la tierra y el cielo, los astros y su lenguaje oculto, las líneas y los colores, los saberes silenciosos (y silenciados), se condensa el universo complejo de Xul. Y es que si bien la historia del arte argentino lo rescató como artista plástico, este oficio es apenas la punta del iceberg. Xul fue, entre otras cosas, inventor, metafísico, lingüista, titiritero, arquitecto y creador de un mundo plástico inclasificable. Su amigo Jorge Luis Borges lo definió como «un hombre versado en todas las disciplinas, curioso de los arcanos, padre de escrituras, de lenguajes, de utopías, de mitología, panajedrecista y astrólogo, perfecto en la indulgente ironía y en la generosa amistad».
Publicado en La Capital
Entrevista a Cecilia Rabossi, curadora de la exposición de Xul Solar en el MNBA
SG: Xul Solar es un artista enigmático con intereses muy diversos, esto hace que parezca inabordable ¿nos querés contar cómo está planteada la muestra?
CR: En el tiempo que Xul Solar esté en Europa se siente muy atraído por todo el entorno y eso lo conecta y hace de nexo con todos los mundos posibles dándole una especie de ordenación de carácter visionario, cada mundo es inagotable esto es un poco lo que quise evidenciar en la muestra que está dividida en seis núcleos: 1- Arte y Literatura. Amistades; 2- Músico Visual, basándome en la tesis doctoral de Cintia Cristiá; 3- El mundo del lenguaje. 4- Espacios habitables; 5- Lo místico, lo esotérico, lo oculto y 6- Escritura plástica.
Como dijo Borges en la exposición retrospectiva dedicada a Xul Solar en el Museo de Bellas Artes de La Plata realizada en 1963 con más de 90 obras el mismo año de su muerte, “a Xul le interesaba todo y todo era susceptible de ser transformado o mejor dicho recreado”. Sobre el núcleo uno: “Arte y Literatura. Amistades”
El primer núcleo de la muestra da cuenta de su estadía en Europa (1912 a 1914) su entorno, su inserción en el medio artístico y su amistad con Petorutti y Borges. Allí se expone una carta que Xul le envía sus padres contándoles sobre su encuentro con un almanaque de Der Blaue Reiter que es el nombre que recibieron los artistas del neo expresionismo alemán y esto habla de cuanto le interesaba todo, allí también se expone un catálogo de la primer muestra individual en Italia (1920); además, aparece un ejemplar de revista Martin Fierro donde escribe dando apoyo a Pettoruti sobre la primera exposición en el Salón Witcomb que ocasionó gran revuelo en Bs. As; también se expone un libro único de BoRges “El idioma de los argentinos” ilustrado por Xul que lo hizo especialmente a pedido de su amigo. Lo que hace Xul, es integrar todo.
Sobre el núcleo dos: Músico Visual. Xul trae muchísima música de Europa en la que introduce cambios como se puede ver las obras expuestas, en vez de pentagramas hace hexagramas y modifica la forma de las notas, también introduce el ritmo musical en sus obras pictóricas como en “San Danza”, “Contrapunto de Puntas” o “Impromptu de Chopin” entre otros.
Sobre el núcleo tres: El mundo del lenguaje. El lenguaje es pensado por Xul, como lingua franca para Latinoamérica combinando elementos del portugués y del castellano con estructuras del inglés y el alemán, también incorpora algunas palabras del francés y del italiano pero principalmente del portugués de Brasil por eso comienzo ese núcleo con la obra “dos ajos”.
Sobre el núcleo cuatro: Espacios habitables. Aquí tenemos una carpeta que funciona como una enciclopedia de imágenes que trae de Europa con recortes, que como se puede observar desde allí se desprenden cantidad de dibujos, acuarelas y gouaches inspiradas en esos esas imágenes.
Sobre el núcleo cinco: Lo místico, lo esotérico, lo oculto. La clave astrológica se despliega en toda la muestra, como se puede ver en todos los núcleos distribuimos los signos de la carta astral del Xul, hecha por él mismo que se muestra en la entrada a la exhibición y lo pusimos porque tiene que ver en cómo era la ubicación de los astros el día de nacimiento de Xul y como esto iba a influir en su persona a lo largo de su vida. En este sector se muestran obras que tienen que ver particularmente con el i chin, las cartas tarot modificadas, el horóscopo, lo religioso y la astrología exhibiéndose las cartas natales de Oliverio Girondo, Leopoldo Marechal y Federico Chopín.
Sobre el núcleo seis: Escritura plástica. Las grafías plastiútiles se podrían organizar en seis sistemas: geométricas, cuadradas, cursivas, vegetales y antropomórficas o zoomórficas. Además, los retratografías que representan retratos de personajes fundamentales de diversas religiones como “El Gran Rey Jesús”
SG: ¿Se puede pensar que su deseo de procesar toda esta información es comparable al movimiento antropofágico brasilero?
CR: Su regreso a la Argentina en el 24’ es clave, y eso es lo que se evidencia en el primer núcleo de la muestra: haber estado en Europa tanto Xul como a Pettoruti les dio una cabeza renovada y de alguna manera lo que quieren decir ellos es, sí, uno tiene que respetar a sus mayores pero ya basta…. porque habla de “deglutir” y sí se podría decir que tiene que ver con el manifiesto antropofágico brasilero de Oswald de Andrade que se da hacia 1928.
SG: ¿En qué claves podemos leer las obras de Xul Solar?
CR: El sobre todo es un humanista; en cuanto a lo religioso no es monoteísta; es esotérico como se puede ver en sus cartas de tarot, el horóscopo o el I-Ching donde él mismo se incluye; también podemos decir que fue visional en una clave utópica o astrológica.
SG: Si pensamos en Xul Solar como un transformador ¿cuáles fueron las cosas que recreó, cambió o modificó?
CR: El creía que su misión consistía en una revolución cotidiana por eso estaba en una revolución permanente y esto se puede evidenciar en el cambio que introduce de todos estos mundos en que se sumerge. El busca por todos los medios destrabar y modificar los sistemas existentes de conocimiento tales como el lenguaje, la música, la escritura y el pensamiento esotérico. Se mete en estos sistemas para mejorar el conocimiento y la educación, por ejemplo en la música, modifica el teclado del piano donde no cambia el sonido sino las teclas para facilitar su ejecución, también cambió el sistema de notación musical, hacia 1927 comienza experimentar con las transformaciones de las notas, la variación del pentagrama y desarrolla diversos tipos de notaciones musicales como la trigramática o enarmónica; así mismo sustituye el sistema decimal por el duodecimal, que es un sistema con carga astrológica; él además como era políglota combinaba los idiomas como hace como por ejemplo entre el portugués y español como vemos en el nombre de la obra “dos ajos”; se puede decir que en la lengua hace un planteo geopolítico con el neocriollo, sus san signos y la panlengua; conjuntamente en la escritura hace un planteo plástico como en las grafías plastiútiles, que se pueden desglosar y traducir sus significados, como se puede ver en algunas anotaciones en neocriollo en los márgenes de algunas obras expuestas y entre otras cosas también creía en ciudades futuras como se puede ver en el núcleo espacios habitables.
SG: ¿Qué es lo que lo lleva a generar tanta diversidad de mundos?
CR: Borges, decía que Xul era un ciudadano cosmopolita y esa es la idea que me llevó a mostrarlo como un artista global cruzando muchas de las líneas de interés que él persiguió para conseguir la fraternidad entre los hombres.
Cecilia Rabossi Licenciada en Artes de la Facultad Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires, Curadora independiente desarrolla tareas de investigación, producción y curaduría de exposiciones en Argentina y el exterior. Miembro de AACA (Asociación Argentina de Críticos de Arte) y del GEME (Grupo de Estudios Sobre Museos y Exposiciones). Obtuvo la beca Trabuco a la investigación 2015. Se desempeñó en el área de programación del Museo de Arte Moderno (1997- 2001). Autora y coautora de varios libros y catálogos sobre arte argentino y latinoamericano.
Publicado en Leedor