Censuran muestra de arte por iniciativa de grupos ultra católicos

La obra se encontraba expuesta en un espacio de memoria

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Censura en la Ex-Esma

Ayer por la tarde, funcionarios de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación dieron la orden de bajar la obra “María Feminista” que se exhibe en la sala principal del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, en el marco de la muestra colectiva Para Todes, Tode – Plan de lucha, curada por Kekena Corvalán.

La obra en cuestión es una escultura de la artista Coolpa que representa la imagen de la virgen María con un pañuelo verde de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Junto a más de 150 obras de mujeres, lesbianas, trans, travestis y no binaries de todo el país, forma parte de una muestra que fue montada y producida junto al colectivo de trabajadorxs del Conti y que se enmarca en nuestro plan de lucha contra el desfinanciamiento del espacio y las deudas millonarias a artistas por parte de la Secretaría que conduce Claudio Avruj desde la asunción del gobierno de Mauricio Macri.

Este acto de censura es consecuencia de una medida cautelar del Juez Federal Esteban Furnari, a cargo del Juzgado Contencioso Administrativo Federal Nº 10, a partir de una demanda iniciada por un grupo de abogados católicxs antiderechos. Pero no hubiera sido posible sin el apoyo del Ministerio de Justicia y de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que tomaron la repudiable y antidemocrática decisión de no apelar y dar la razón a aquellxs que alegan sentirse ofendidxs en sus creencias religiosas por una obra de arte. La orden judicial obliga a la institución a ocultar la obra en una sala a puertas cerradas, a colocar carteles alertando al público que dicha obra puede herir su sensibilidad (una medida preventiva que ya se había efectuado) y a restringir el acceso a menores de edad.

Desde la inauguración de la muestra, tanto la curadora como lxs artistas y lxs trabajadorxs hemos recibido miles de mensajes con amenazas por parte de estos grupos violentos y retrógrados. A los pocos días, la Secretaría de Derechos Humanos cedió ante sus presiones y publicó en Twitter un confuso comunicado en el que intentó despegarse de la obra, acusando a la curadora de haber actuado de “mala fé”. Desde ese momento, además, buscaron insistentemente que la propia curadora sea la responsable de bajar la obra. Extraoficialmente pudimos saber que las presiones vinieron desde la propia Vicepresidenta Gabriela Michetti.

No es la primera vez que se censura una obra en la ex ESMA. En octubre de 2017, por orden de Avruj, fue dada de baja una escultura titulada «Ausencias» de Jakie Simsolo y Adriana Albi en el Archivo Nacional de la Memoria porque «remitía al caso de Santiago Maldonado». Resulta ineludible, también, el paralelismo con la muestra de León Ferrari en el Centro Cultural Recoleta en 2004, tanto por las características de las obras expuestas y su vinculación con los símbolos religiosos, como por los grupos que promovieron activamente su clausura. En ese entonces, el apoyo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires fue fundamental para vencer judicialmente la censura. Por nuestra parte, nos honra haber albergado en esta misma sala del Conti la última exhibición que inauguró León en 2013 antes de su muerte.

Ni un funcionario ni un juez pueden decidir lo que las personas pueden ver o no. La libertad de expresión es un derecho garantizado por la Constitución Nacional y la Convención Interamericana de Derechos Humanos. Constituye, sin dudas, uno de los pilares del sistema democrático que, aunque con baja intensidad, aún logramos conservar en nuestro país.

Censurar un hecho artístico es reprimir ideas, creencias, expresiones. Es lesionar la cultura y la libertad creadora. Lxs trabajadorxs del Conti manifestamos nuestro apoyo a Coolpa, a la curadora Kekena Corvalán y a todo el colectivo de creadorxs que integran esta muestra hecha a pulmón, sin ningún apoyo económico institucional.

Defendemos el arte que provoca, que incomoda, que denuncia, que interpela. Defendemos la cultura y la memoria en la ex ESMA día a día contra el vaciamiento del macrismo negacionista.

No a la censura
¡El Conti no se achica!

Comunicado de Trabajadorxs del Conti – ATE


Abogado ultracatólico logra censurar una obra de arte expuesta en la ex-ESMA

Por Daniel Satur

No importa si es arte. Lo que importa es que nadie haga nada que se salga de las arbitrarias normas del “bien” y el “mal” que impone la moral y la doctrina católica, apostólica y romana. No importa si se cae, una vez más, en la acostumbrada arremetida censora, criminalizadora y represora de quienes piensan, sienten y creen distinto. Lo que importa es batallar para que quien piensa distinto no lo exprese, que quien siente distinto no lo experimente y que quien cree distinto no lo haga sin culpa.

Este miércoles por la tarde el fanatismo clerical volvió a dar una nueva nota destacada. El juez federal Esteban Furnari, a cargo del Juzgado Contencioso Administrativo Federal Nº 10, hizo lugar a una medida cautelar interpuesta por miembros de la Corporación de Abogados Católicos según la cual se solicita a la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación que “baje” de exhibición una obra de arte expuesta en la sala principal del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, ubicado en el predio de la ex ESMA.

Inmediatamente, la secretaría a cargo de Claudio Avruj dio la orden de retirar la obra, provocando la lógica reacción de quienes organizaron la muestra colectiva “Para Todes, Tode – Plan de lucha”, curada por Kekena Corvalán.

La escultura en cuestión pertenece a la artista Coolpa, lleva por título “María Feminista” y representa una imagen de la virgen María cuyo rostro está cubierto por un pañuelo verde de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto. Integra una muestra colectiva de la que participan más de 150 obras de artistas de todo el país, producida junto al personal del centro Conti.

La demanda judicial fue iniciada por el abogado ultracatólico Pedro Andereggen, quien acusó al mismo Claudio Avruj de “haber omitido -con ilegalidad y arbitrariedad manifiesta- ejercer los actos que son de su facultad” para que el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti “cese en la lesión y ofensa actual” a los sentimientos religiosos que el letrado dice representar.

En rigor, Andereggen acusa al centro Conti de haber “profanado y/o ultrajado y/o burlado y/o ridiculizado y/o mofado y/o escarnecido y/ o, mínimamente, menoscabado a través de una indebida instrumentalización” una imagen de “la Santísima Virgen María en su advocación de la ‘Medalla Milagrosa / Inmaculada Concepción’”. Según el demandante la obra no se llamaría “María Feminista” sino “Virgen Abortera”.

En su resolución cautelar, el juez Furnari tomó los argumentos del demandante como válidos y decidió que la Secretaría de Derechos Humanos, “entre tanto lleve a cabo las anunciadas medidas, tendientes al retiro definitivo de la imagen de la Virgen, en el ejercicio de su poder de policía, arbitre los medios necesarios para que la imagen sea exhibida en un salón a puertas cerradas, con el debido control de acceso sólo autorizado a mayores de edad y con la correspondiente inclusión de cartelería previa al ingreso, en la cual se alerte sobre los eventuales efectos que podría causar en los sentimientos religiosos de los espectadores”.

Las trabajadoras y los trabajadores del centro Conti denuncian que tanto el secretario Avruj como el Ministerio de Justicia que conduce Germán Garavano no dudaron en apoyar la decisión judicial, tomando “la repudiable y antidemocrática decisión de no apelar y dar la razón a aquellxs que alegan sentirse ofendidxs en sus creencias religiosas por una obra de arte”.

La denuncia del personal nucleado en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) agrega que la obra colectiva intervenida judicialmente fue organizada en el marco de un “plan de lucha contra el desfinanciamiento del espacio y las deudas millonarias a artistas por parte de la Secretaría que conduce Claudio Avruj desde la asunción del gobierno de Mauricio Macri”.

Desde el centro Conti denuncian que desde la inauguración de la muestra, tanto la curadora como artistas y personal del organismo recibieron “miles de mensajes con amenazas por parte de estos grupos violentos y retrógrados. A los pocos días, la Secretaría de Derechos Humanos cedió ante sus presiones y publicó en Twitter un confuso comunicado en el que intentó despegarse de la obra, acusando a la curadora de haber actuado de ‘mala fé’. Desde ese momento, además, buscaron insistentemente que la propia curadora sea la responsable de bajar la obra. Extraoficialmente pudimos saber que las presiones vinieron desde la propia vicepresidenta Gabriela Michetti”, detallan en un comunicado conocido este jueves.

Las trabajadoras y los trabajadores recuerdan que “no es la primera vez que se censura una obra en la ex ESMA. En octubre de 2017, por orden de Avruj, fue dada de baja una escultura titulada ‘Ausencias’ de Jakie Simsolo y Adriana Albi en el Archivo Nacional de la Memoria porque ‘remitía al caso de Santiago Maldonado’”.

Recordando a León

Este nuevo caso de censura judicial a obras artísticas a partir del pataleo rabioso de sectores conservadores, ultracatólicos e integristas trae a la memoria la campaña de la Iglesia contra el gran artista León Ferrari en 2004, cuando este exponía sus obras en el Centro Cultural Recoleta.

En aquella exposición Ferrari cuestionaba a la Iglesia, al poder y la represión. Y la cruzada en su contra no provino de un ignoto abogado reaccionario sino del actual papa Francisco, entonces arzobispo de Buenos Aires. A la par de demandas judiciales para frenar la exposición, Jorge Bergoglio diría en una carta (luego leída en todas las iglesias) que el artista era un “blasfemo”, amparando de hecho los ataques violentos contra las obras de Ferrari.

En el comunicado conocido este jueves, el caso de Ferrari de 2004 es recordado por las trabajadoras y los trabajadores del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, quienes afirman que “ni un funcionario ni un juez pueden decidir lo que las personas pueden ver o no. La libertad de expresión es un derecho garantizado por la Constitución Nacional y la Convención Interamericana de Derechos Humanos. Constituye, sin dudas, uno de los pilares del sistema democrático que, aunque con baja intensidad, aún logramos conservar en nuestro país”.

“Censurar un hecho artístico es reprimir ideas, creencias, expresiones. Es lesionar la cultura y la libertad creadora. Lxs trabajadorxs del Conti manifestamos nuestro apoyo a Coolpa, a la curadora Kekena Corvalán y a todo el colectivo de creadorxs que integran esta muestra hecha a pulmón, sin ningún apoyo económico institucional”, agregan.

Y finalizan diciendo que defienden “el arte que provoca, que incomoda, que denuncia, que interpela. Defendemos la cultura y la memoria en la ex ESMA día a día contra el vaciamiento del macrismo negacionista”.

La Izquierda Diario


¿Qué es lo que está pasando en el Centro Cultural Conti con #paratodestode #plandeLucha?

Por Kekena Corvalán (Lucrecia Esteban para Malón de Octubre)

Como es sabido, soy la curadora de la exposición que está aconteciendo en el Centro Cultural Haroldo Conti, desde el 9 de marzo hasta el 15 de mayo de 2019, en las Salas 1, 3, 4 y 5, baños y hall, de artes visuales, y también realizando activaciones de escénicas, editorial, audiovisuales, charlas en el teatro, el Bar, la biblioteca, la sala Nicolás Casullo, el cine, los jardines circundantes.

#paratodestode #plandeLucha es un proyecto de artes integradas que surge de la convocatoria realizada por trabajadorxs del Conti en septiembre de 2018. Yo elaboré una propuesta atendiendo a lo que estaba sucediendo, la conversamos por primera vez en diciembre, la seguimos pensando conjuntamente en enero, la produjimos en febrero y la inauguramos en marzo, pensando un doble eje Géneros y Memoria. Tiene características inéditas en la historia de las exhibiciones y la curaduría en Argentina. En primer lugar porque fue convocada por trabajadorxs no funcionarios de un espacio público de gerencia estatal. El comitente, para decirlo así, son trabajadorxs, en estado asambleario y horizontal, de todas las áreas del espacio, (aunque luego fue comunicado y conversado con el director del Centro Cultural firmándose incluso un convenio de servicios curatoriales). En segundo lugar, porque participan 162 artistas, y es una exposición pensada para acompañar el 8 de marzo, enunciándose como una movida de artistas mujeres, lesbianas, travestis, trans, no binaries. En tercer lugar, porque de esas 162 personas, solo unas 70 viven y trabajan en CABA, lo que da una abrumadora presencia federal; hay artistas de casi todas las ciudades capitales de Argentina, buena parte debutando como artistas en Buenos Aires, incluyéndose además unas pocas que visitaron la ciudad por primera vez para la inauguración. Y en cuarto lugar, es inédita en cuanto a que es la primera vez que una organización social sindical de trabajadores informales auspicia y acompaña una exposición de artes visuales, la CTEP (Confederación de Trabajadores de las Economías Populares).

Estas características cumplen con un objetivo que planteamos en el proyecto curatorial, que fue hacer un proyecto realmente interseccional, que contemplara todos los condicionamientos que se activan en la intersección de género, clase y geografía.

La muestra sufrió desde el comienzo muchísimas presiones, denuncias, carta documento, petitorios, censuras y amenazas de ser suspendida total o parcialmente, por parte de funcionarixs de primera línea del poder ejecutivo, presionadxs por sectores ortodoxos de extracción religiosa. El centro de las amenazas y denuncias es la obra María Feminista, de la artista _coolpa, conocida popularmente como La Virgen Abortera, escultura que reproduce a una Virgen María niña con un pañuelo verde de la campaña por la legalización del aborto en su cara.

virgen nota

Si bien es el centro de las denuncias, convengamos que no es la única obra que despierta molestias en sectores extremos anti derechos.  Hay por lo menos 4 obras más que provocan comentarios agresivos y ultramontanos. Estas son: el Santuario de Lucy Bruniard, Travas, Tortas y Maricas; el Confesionario Masturbatorio de Mara Verena Castro; 10/11 (la gente la llama Pañuelo Celeste), de María Pichot; Proyecto Oxígena (Arde Mami), de Jessica Beard.

Confesionario masturbatorio, de Mara Verena.
Confesionario masturbatorio, de Mara Verena.
Pañuelo Celeste, María Pichot.
Pañuelo Celeste, María Pichot.
Santuario de Tortas, Maricas y Travas, de Lucy Bruniard
Santuario de Tortas, Maricas y Travas, de Lucy Bruniard
Arde Mami, de Jessica Beard
Arde Mami, de Jessica Beard

La muestra es un éxito de público. Muchas personas refieren que han ido al Conti por primera vez, porque además, tenemos la potencia del apoyo de decenas de medios independientes, que garantizan, frente a los medios hegemónicos, una viralización que llega a todes. Especialmente, muy especialmente, en las capas jóvenes de menores de 35 años, que en las redes reivindican la movida como propia, porque se ha calado especialmente (y el uso de ese significante-granada “todes” es clave para ello), en la marea verde. Así mismo la crítica y el campo de colegas asisten a verla y han felicitado la movida. Realmente, no podemos estar más felices.

Pero el hostigamiento por parte de la secretaría que preside Avruj es continuo. Hubo llamados para que “se baje” la virgen, en concreto, antes de la principal actividad educativa con colegios y público general, que será el 11 de abril próximo, que se suman a las presiones, amenazas, cartas documentos. Pero ayer 3 de abril fue la gota. Por orden de Avruj, el flyer de mi actividad, con mi nombre y mi cara (que reproducimos aquí debajo), debe ser removido. Si no sacamos la virgen, sacamos a la curadora que se niega a sacar la Virgen por un compromiso con la libertad de expresión y con la ética curatorial, una manera que encontró esta gestión de cumplir con las órdenes de los sectores de extrema derecha cuyos intereses representan. Y algo aún muchísimo más grave, un severísimo error desde todo punto de vista, una grosería desde la gestión y la producción de una muestra: la orden de sacar de todos los espacios institucionales el logo de la CTEP, porque es una organización opositora al desgobierno actual, a la política económica de Mauricio Macri.

Quitar el logo de CTEP, quitar mi nombre y foto de toda actividad educativa de la muestra, son la visibilización del maltrato de la secretaría para con el Conti, que incluye el desfinanciamiento (esta gestión debe 4 millones de pesos de honorarios de talleres, actuaciones, recitales, producciones del año 2018 y no ha dispuesto presupuesto ni voluntad de pago para este 2019). Pero hay más, la derecha presiona, no solo sobre nosotres, sino sobre todo pensamiento crítico. En una escuela de Baradero, por ejemplo, se expulsó automáticamente con amenaza a gritos de que ni se le ocurriera reclamar indemnización a una docente que sugirió que una de las visitas de este año del colegio a Buenos Aires fuera a la exposición #paratodestode, un caso más de censura en estrecha relación con ajuste económico y vaciamiento de contenidos, que parece ser la actual política cultural de parte de un plantel de funcionarios que solo sabe cumplir órdenes imperiales achicando y cometiendo errores tan groseros, sin precedentes en la historia de nuestro país.

Este es el estado de situación de nuestra exposición. Solo pedirle a quien lea estas líneas que la mejor solidaridad es apoyar este plan de lucha, apoyar al Conti que no se achica, planteado hoy como un espacio amoroso y esperanzador dentro de un estado de desguace y persecución de todo pensamiento crítico. Un espacio que involucra tanto corazón, tanta cabeza, tanto tiempo y tanto recurso. Nosotres seguimos creyendo en nuestra política del deseo, en nuestros modos otros culturales, en las economías del don, en la curaduría afectiva, en los emprendimientos populares, transfeministas y federales. pedirles Que vengan a ver esta exposición, que la critiquen, que la recomienden, que la apoyen. Un campo cultural local sensible y maduro le dice no a la censura, no al achique, no al vaciamiento económico y simbólico. Allí estamos, en el Conti, hasta mediados de mayo, de martes a domingo de 11 a 20 hs, en Av Libertador 8151, CABA.

Leedor

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