Funcionarios, urbanistas e intelectuales de la región se encuentran en Colombia en el Seminario sobre Ciudades Inclusivas

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Los históricos procesos de segregación y exclusión urbana deben ser revertidos a través de intervenciones integrales. Es por esto que se hace necesario debatir estrategias de ocupación del suelo y mecanismos eficientes de movilidad y transporte para unas ciudades mejor integradas.

El encuentro contará con invitados nacionales e internacionales como Luis Felipe Henao, ministro de Vivienda de Colombia; Mabel Causarano, ministra de Cultura de Paraguay; Augusto Barrera, exalcalde de Quito y actual director de FLACSO (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales); Aníbal Gaviria, exalcalde de Medellín; Daniel Rivera, director de Proyectos de Desarrollo Social CAF (Banco de Desarrollo de América Latina); Margaret Lombe, de Boston College; Marcelo Cabrera, alcalde de Cuenca, Ecuador, entre otros.

Fecha: Viernes, 29 de enero de 2016.

Lugar: Universidad de los Andes. Auditorio Lleras.


‘La lucha contra el cambio climático no es una moda’

A solo nueve meses de que se lleve a cabo Hábitat III, la cumbre urbana más importante y que definirá el futuro de las ciudades, expertos de todo el mundo se reúnen para anticiparse al evento que se llevará a cabo en Quito (Ecuador), y preparar los temas que se discutirán ahí.

Este viernes, en Bogotá, se llevará a cabo un seminario internacional en la Universidad de los Andes sobre cómo hacer ciudades más incluyentes. José Carrera, vicepresidente de Desarrollo Social del Banco de Desarrollo de América Latina-CAF, organizadores del evento, asegura que las llaves de la inclusión responsable son el transporte masivo, los servicios públicos, el espacio público y la educación.

El seminario convoca a 16 expertos nacionales e internacionales, a los alcaldes de Cuenca (Ecuador), Tarija (Bolivia), al ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, y al director nacional de Planeación, Simón Gaviria, entre otros.

¿Por qué hablar de ciudades inclusivas?

Las ciudades en América Latina son importantes porque más de 80 % de sus habitantes viven en ciudades y de ese porcentaje, entre el 25 y el 50 % viven en condiciones precarias, sin transporte adecuado, servicios públicos, conectividad ni espacios públicos que mejoren la calidad de vida.

¿Cuáles son los requisitos para ser inclusivas?

Son cuatro. El primero, que haya transporte urbano y multimodalidad: no solo metro y buses, sino un sistema que una a ciclistas y peatones para que puedan moverse efectiva y dignamente desde sus hogares hasta sus lugares de trabajo.

El segundo es el espacio público de calidad para todos, para acceder al ocio sano y la diversión sin pagar, en lugares a donde la gente pueda llegar caminando.

También son claves los servicios públicos las 24 horas del día, con la calidad y presión suficientes. Es decir, que sean iguales para ricos o para pobres.

Y está la educación. Es clave enfatizar en dos poblaciones: los niños menores de 5 años con clases, salud y nutrición, porque están formando sus cerebros. Y también con los jóvenes entre 14 y 18 años, y recuperar a los que hayan desertado para que se preparen para la vida laboral.

¿Por qué los jóvenes son tan importantes?

América Latina llegará a un bono demográfico entre el 2025 y el 2030, porque la mayor cantidad de habitantes de las ciudades serán jóvenes en edad de trabajar y ellos impulsarán la productividad de la región.

¿Qué tanto ha avanzado América Latina contra el cambio climático?

Todos los países deben trabajar en ello, bien sea en la mitigación del riesgo o en la adaptación. Las ciudades deben reconocer que las condiciones atmosféricas han cambiado, y que el acceso al agua ya no es el mismo: en las regiones andinas, los glaciares están desapareciendo y hay que adaptarse a una menor disponibilidad del líquido. No es solo cuestión de la oferta, sino de cómo tener un consumo eficiente, eliminar pérdidas, crear conciencia.

¿América Latina sí se ha esforzado?

La región está consciente de los cambios; algunas ciudades como Medellín (Colombia), Guayaquil (Ecuador), Fortaleza (Brasil) y Buenos Aires (Argentina) han tomado el liderazgo. La lucha contra el cambio climático no es una moda. Vino, y está para quedarse. Además, afecta la propagación de enfermedades como el zika, la malaria o el dengue: como la temperatura aumenta, el mosquito que las propaga cambia su localización geográfica.

¿Cómo involucrar al sector privado en todo esto?

Es fundamental para el crecimiento de los países, si se toma en cuenta que más del 60 % del producto interno bruto lo producen las ciudades.

Pero preocupa que 6 de las 10 ciudades más importantes han crecido más lentamente. Solían ser el motor del crecimiento, y ahora lo impiden. Esto se debe a sus condiciones de precariedad, al hacinamiento y al mal transporte masivo.

La gente se toma entre 2 y 4 horas en el tránsito, y esto impacta la productividad. Entonces, hay un repunte de las ciudades intermedias, con entre 500.000 y 2,5 millones de habitantes.

¿No ha sido muy pasivo el sector privado?

Han hecho cosas. Por ejemplo, en Medellín financian a las guarderías para niños cerca de las estaciones de Metrocable. Así velan por los niños, los futuros ciudadanos.

Y también han generado programas educativos para identificar las competencias que se requieren para que los muchachos puedan emplearse. Pero las urbes también deben crear condiciones para que ciudades tengan industrias.

¿Qué es mejor, hacer regeneración urbana o nuevos desarrollos?

La regeneración urbana es clave para mejorar la calidad de vida y del hábitat de zonas deterioradas, donde viven poblaciones marginales. Esto no significa que no se hagan planes de ordenamiento territorial que densifiquen y no desparramen las ciudades, para estimular la inclusión.

Publicado por El Tiempo
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