El poder en leer todos juntos

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Por Alina Marrero

Nada equipara el contacto de vida a vida. Hay actividades culturales para niños que son extraordinarias porque nos ayudan a entender que, a pesar de los atractivos de la tecnología moderna, en la cual creemos, hay experiencias que nunca podrán ser desplazadas. Además de sentirse muy atraídos por las computadoras y encantos de los vídeojuegos y teléfonos inteligentes, los niños adoran jugar bajo la lluvia y disfrutan la lectura de libros convencionales. Ver las expresiones y reacciones de los infantes cuando alguien les lee un cuento proporciona una satisfacción sana y emotiva. Sobre esta insuperable satisfacción conversamos con los integrantes de “Leamos todos juntos”, un proyecto de lecturas de cuentos dramatizados que realiza la compañía artística Cuarzo Blanco, Inc.; y que retoma su viaje durante 2016-2017, comenzando el 8 de septiembre, Día del Maratón Puertorriqueño y Latinoamericano de la Lectura.

Este proyecto, didáctico y divertido, pretende atraer la atención de los estudiantes hacia todo lo que un libro puede ofrecerles. Durante 2015-2016, los lectores impactaron los municipios de Culebra, Ponce, Maunabo, Guayama, Arroyo, Hormigueros, San Juan y San Sebastián. Llegaban a cada estación formando “el trencito de la lectura” y cargando “el bultito viajero” con los libros que leerían, los cuales regalaron a las bibliotecas de las escuelas o locales que visitaron. Ahora planifican llegar a nuevos lugares en los meses venideros… pero ¿cómo comenzó todo?

“Leamos todos juntos” vio la luz en 2009, cuando un grupo de nueve actores y dos asistentes, capitaneados por Adriana Pantoja y apoyados por Fundación SM, visitaron el Centro Sor Isolina Ferré, en Caimito. Originalmente, los lectores se dividieron en dos grupos para atender, uno, a los pequeñines (entre 8-9 años) y, otro, a los más mayores (10-12 años). En ese momento, no existía aun el concepto del trencito ni del bultito viajero; solo la idea de acercar los niños a la lectura y hacerles entender que los libros son ‘amigos’ en los que siempre se puede confiar.

En aquel 24 de abril de 2009, a las 3:30pm, Ineabelle Colón, Javier Ortiz, Vivian Casañas, Nelson del Valle, Melliangee Pérez, José Luis Gutiérrez, Marie Hernández, Verónica Ortiz, Mayra Nieves, Ingrid Baldera y José Brocco celebraron el Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor (proclamado así por la UNESCO desde 1996 y celebrado mundialmente el 23 de abril). Se escenificaron cuentos y fragmentos de “Una luna junto a la laguna”, de Adela Basch; “Pepe Gorras”, de Tina Casanova; “Gabriel Comelibros”, de Matilde García Arroyo e Hilda E. Quintana; “Si tienes un papá mago”, de Gabriela Keselman; y extractos de la antología “Historias para sentir”, de Oscar Martínez Vélez, et. al., todos de la colección de literatura infantil de Ediciones SM.

A pesar que Pantoja quiso repetir el proyecto de manera anual, para seguir celebrando con esta actividad el Día Internacional del Libro de forma permanente, no pudo lograrlo hasta abril de 2013, cuando un grupo más reducido de actores visitó el Colegio San Gabriel para Sordos. Desde 2005, Cuarzo Blanco, Inc. ha acogido a la comunidad sorda dentro de sus proyectos, por lo que todos tienen intérpretes del lenguaje de señas para lograr la debida inclusión. El intérprete Jorge Santiago, quien ya había comenzado a laborar en este menester para Cuarzo Blanco, desde 2009, tuvo a su cargo la interpretación al lenguaje de señas en 2013, gracias al apoyo de siempre de Servicios Orientados al Sordo, Inc. En esta ocasión, repitieron los actores-lectores Javier Ortiz y Melliangee Pérez; y entró nuevo personal: Loaya Quesada y Nydia Meléndez.

A pesar de la excelente experiencia en el Colegio San Gabriel, el proyecto se detuvo nuevamente, pero solo de manera momentánea: el mismo regresó con fuerza en septiembre de 2014, al presentarse de nuevo ante la comunidad estudiantil del Colegio San Gabriel para Sordos, en la Tiendita del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP). “Poco a poco, comienza a crearse el concepto de un trencito, pero aun no tenía como tal su nombre. ‘El trencito de la lectura’ y ‘el bultito viajero’ son ideas que van surgiendo, desde 2014 en adelante, según seguimos visitando lugares a través de Puerto Rico. Eso sí, dejar los libros que leíamos en las instituciones visitadas -gracias al apoyo de Fundación SM- siempre fue un norte desde el comienzo, en 2009”, comenta Pantoja, productora y directora de Cuarzo Blanco.

Durante la temporada 2014-2015, además de la Tiendita del ICP, se visitaron dos escuelas: Jesús T. Piñero, en Carolina; y Pedro Meléndez, en Santa Isabel. Por otra parte, se celebró el Día Internacional del Libro, en la Casa del Libro en el Viejo San Juan. Este periodo vio el ingreso del actor Omarjadhir Flores a las lides de “Leamos todos juntos”; y, en 2015, el próximo en incorporarse fue el también actor Jonathan Amaro.

Ya con un equipo más completo, en la siguiente temporada, los actores Omarjadhir, Loaya, Jonathan Amaro, Melliangee, Javier y el intérprete de lenguaje de señas para sordos Jorge Santiago, dirigidos todos por Pantoja, formaron la alegría en los vagones del “tren de la lectura”, llevando y dejando en cada parada un “bultito viajero”. Los libros que se leyeron, de la Editorial SM y la Editorial del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), fueron “Valentina ya no dice solo mú”, de la puertorriqueña Ángeles Molina Iturrondo; “Una luna junto a la laguna”, de la argentina Adela Basch; y “El archipiélago mágico”, de la escritora puertorriqueña Isabel Arraiza Arana.

“Viajo en este trencito desde 2013”, nos dijo con entusiasmo Loaya, quien considera que el proyecto es un reto para ella cada vez que se presenta, porque los grupos de niños ofrecen diversidad. La actriz, quien estudio teatro en la Universidad de Puerto Rico, en Río Piedras; y fundó su propia escuela de Danza Árabe Egipcia, nos explicó que los grupos no se parecen… “Sí, cambian de lugar en lugar. Siempre me estoy preguntando, ¿qué pasará?, ¿lo entenderán? Sin embargo, cada vez que nos presentamos recibimos grandes satisfacciones. No importa cómo sean los grupos, los niños quedan encantados. Es una experiencia que se llevan para toda la vida”.

Por su parte, Jonathan Amaro, quien viaja en el trencito desde 2015, expresó que cuando recibió la invitación para integrarse al proyecto sintió mucha alegría porque es aficionado a la lectura desde su más tierna edad. Promover la lectura en niños y jóvenes es para él vivir el sueño de su misión, ya que el actor posee un bachillerato en teatro y en educación. “Le damos a los niños el empujoncito que necesitan para enamorarse de la lectura. Además, les dejamos los libros que interpretamos. El lenguaje de señas para sordos es otro atractivo de este proyecto. Aunque no haya sordos en un grupo, funciona como elemento de conciencia. Los niños empiezan a aceptarlo como algo normal. Muchas personas no saben cómo enfocar la realidad de las personas especiales, pero es cuestión de educación. Adriana comenzó a integrar lenguaje de señas en las funciones de Cuarzo Blanco hace 11 años y esperamos que otros lo repliquen”, informó.

Javier Ortiz Cortés nació y creció en una familia de titiriteros. Su padre, Rafael Ortiz, fundó la compañía El Mundo de los Muñecos con toda su familia. Los niños manejaban los títeres en las funciones y esto hizo de la compañía algo muy especial. En estos momentos, es Javier quien dirige el colectivo, el cual sigue siendo una compañía familiar. Para Ortiz, integrar un proyecto que envuelva lecturas dramatizadas para niños es algo natural. Sobre “Leamos todos juntos” opina que es un proyecto hermoso. “Estoy montado en el trencito desde 2009, cuando comenzó. Recuerdo que la primera función la hicimos en Caimito, en el Centro Sor Isolina Ferré.

El día estaba precioso y contamos con muchos lectores de todas las edades, ya que se celebraba el Día Internacional del Libro. Ese es un recuerdo que tengo grabado en el corazón. Mi vida ha sido trabajar con niños. Yo me entrego a mi trabajo como si fuera la primera y la última vez. Me encanta ver cómo los niños se saborean la lectura. El sonido más hermoso es la risa de un niño”, dijo Javier, a quien le fascina viajar por Puerto Rico. Expresó que, de la reciente experiencia con “Leamos todos juntos”, el viaje a Culebra lo impactó: “Los niños en Culebra no tienen mucho contacto con actividades culturales. Ver las caras de esos niños agradecidos no tiene comparación”.

Las giras del trencito de la lectura lograron que los actores se unieran como una familia, y compartieran vivencias que se convirtieron en anécdotas, como las ocurridas en el Colegio San Gabriel para Sordos. “Cada vez que vamos allí recibimos mucho cariño. Los niños entienden el lenguaje de señas, por supuesto, pero también reciben la sorpresa de lo nuevo, porque nosotros leemos en una forma bien dramática. El lenguaje de señas y nuestro estilo dramático es una buena combinación. A veces, somos nosotros quienes recibimos la sorpresa, como, por ejemplo, en cierta ocasión que visitamos la librería del Instituto de Cultura. Nosotros leímos un cuento para adolescentes. Sin embargo, como los adolescentes sordos no son impactados con frecuencia, nos preocupaba que el cuento fuera demasiado largo, así que se le hicieron unos cortes. Cuando terminamos la lectura ese día, los jóvenes se quedaron con deseos de más y así mismo lo comunicaban, siempre con agradecimiento de tomarlos en cuenta”, informó Javier.

La soprano puertorriqueña Melliangee Pérez, igualmente, viaja en el trencito desde sus comienzos, en 2009. Melliangee, famosa por sus interpretaciones de ópera y zarzuela en importantes escenarios internacionales, también tiene experiencia con ópera para niños. Para ella, llevar la lectura dentro de un sistema fuertemente tecnológico que nos arropa le ha hecho entender que el gusto por la lectura prevalece, que no todo está perdido. “Los niños quieren leer los libros. ‘El bultito viajero’ se deja en cada lugar que dramatizamos y los niños pueden retomar los cuentos. Eso los entusiasma”, reafirmó la cantante.

A Omarjadhir Flores le conmueven las reacciones de los niños, sus caritas, sus ojitos, cuando participan activamente en los cuentos. Nos dijo que, en uno de los cuentos, su personaje atraviesa el mar hacia Culebra. Mientras lo hace, identifica a los oyentes como peces. A veces, les pregunta a los niños por cuál medio desean viajar. Los medios han variado desde una lancha hasta un “jet-ski”. “Es linda la reacción espontánea de los niños. Los públicos son diferentes en cada pueblo; la cultura de cada pueblo es diferente. Puerto Rico es distinto en cada región. A mí me gustó mucho ir a Culebra: fueron muy agradecidos y atentos. La gente se olvida de Culebra; solo van a turistear. Y los niños allá no tienen teatro ni muchas actividades culturales”.

El intérprete de señas para sordos, Jorge Santiago, pertenece al proyecto desde 2013; y a Cuarzo Blanco desde 2009. “Adriana me pone en todo lo que se inventa y eso me llena de satisfacción”, comentó. Para Jorge el acceso de los sordos a la recreación es importante porque ellos pertenecen a la sociedad y la recreación es un derecho humano. Su participación como intérprete permite crear esta conciencia. Además, los niños que no son sordos desean aprender señas porque es algo curioso, misterioso y fuera de lo común. Enseguida comienzan a imitar los movimientos del intérprete y, de cierta forma, hasta los comprenden sin mayor explicación que la palabra que escuchan mientras lo observan.

Después de conversar con este grupo de actores, que ponen todo su corazón en las lecturas dramatizadas para los niños, nos dimos cuenta que la experiencia los beneficia a ellos de la misma manera. Los actores aprenden y crecen tanto como los niños. También se divierten a rabiar en cada una de las paradas del “trencito de la lectura” de este incomparable proyecto inclusivo de Cuarzo Blanco, Inc. Y hasta han tenido la oportunidad de conocer a las autoras de los cuentos que interpretan, como ocurrió el pasado junio, en la Biblioteca Nacional de Puerto Rico. Allí conocieron a la escritora puertorriqueña Isabel Arraiza Arana, quien vive actualmente en Estados Unidos. Ella, quien nunca había visto representado su libro “El archipiélago mágico”, se divirtió muchísimo con el evento y se sintió sinceramente honrada y agradecida por la experiencia -la cual compartió con sus tres hijos y su mamá, quienes también se disfrutaron el evento-.

Para el periodo 2016-2017, la producción espera estacionar “el trencito de la lectura” y llevar “el bultito viajero” en paradas puertorriqueñas nunca antes visitadas, como Cayey, Dorado, Utuado, Loíza, Caguas, Yauco y Peñuelas. El recorrido comenzará con el Maratón Puertorriqueño y Latinoamericano de la Lectura, el cual se celebra anualmente, cada 8 de septiembre. En esta ocasión, la actriz Laura Isabel Cabrera también se integrará al evento educativo, el cual bien disfrutan tanto chicos como grandes.

Puerto Rico cuenta con una importante actividad para niños, muy didáctica, muy divertida y, sobretodo, mágica. Para información sobre próximas presentaciones, pueden escribir al correo electrónico [email protected].

“Leamos todos juntos” es posible, actualmente, gracias al apoyo de la Comisión Especial Conjunta sobre Fondos Legislativos; el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos; la Fundación Nacional para la Cultura Popular; Fundación SM y la Editorial del Instituto de Cultura Puertorriqueña.

Publicado en Fundación Nacional para la Cultura Popular
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